Comentarios a la Nueva Ley Agraria y la Propuesta de Formalización de la Asociatividad en el Sector Agrario
WALTER GALLOSO MARIÑOS – ASESOR Y CONSULTOR
LEGAL
waltergalloso@gmail.com
/// waltergalloso@wgalloso.pe
Resumen
Este artículo analiza la reciente Ley N.º
32434, denominada Nueva Ley Agraria, a la luz del proceso de formalización de
la asociatividad en el sector agrario peruano. Se reflexiona sobre su alcance
normativo, las oportunidades que abre para pequeños y medianos productores, y
su articulación con experiencias previas en América Latina. Asimismo, se
discuten los beneficios y limitaciones de la nueva normativa en relación con la
competitividad y sostenibilidad del sector agrario. Asimismo, se identifican
beneficios potenciales para pequeños y medianos productores, y se plantean
propuestas de mejora en clave de política pública.
Palabras clave
Asociatividad agraria;
formalización; Nueva Ley Agraria; pequeños productores; desarrollo rural; América
Latina. .
Introducción
El debate en torno a la formalización de la
asociatividad agraria en el Perú ha cobrado renovada importancia con la
promulgación de la Ley N.º 32434. Esta norma plantea una serie de disposiciones
que, en principio, pretenden fortalecer el marco institucional del sector
agrario, con especial énfasis en la pequeña y mediana agricultura. El presente
artículo propone un análisis crítico de sus principales disposiciones,
evaluando si realmente constituyen un refuerzo legislativo efectivo para la
asociatividad y el desarrollo sostenible; así como un análisis crítico de su
alcance, comparándolo con programas previos como AGROIDEAS y Haku Wiñay, así
como con experiencias internacionales en Colombia, Ecuador, Chile y Brasil.
Alcances de la Nueva Ley Agraria
La Ley N.º 32434 introduce medidas orientadas a
la formalización de organizaciones agrarias, estableciendo incentivos
tributarios, acceso a créditos y mecanismos de apoyo técnico. Estos elementos
son relevantes para consolidar a las asociaciones como actores económicos
reconocidos, aunque persisten interrogantes sobre la implementación efectiva y
la capacidad institucional del Estado.
La norma establece el Registro Nacional de
Organizaciones de Productores Agrarios como requisito para acceder a programas
estatales, incorpora beneficios tributarios diferenciados (0 % hasta 30 UIT;
1.5 % hasta 150 UIT) y crea la marca de certificación 'Cómprale al Pequeño
Productor Agrario'. Estos instrumentos convierten a la formalización en
condición habilitante para la competitividad.
Formalización y Asociatividad en
América Latina
La experiencia comparada en países como
Colombia, Ecuador, Chile y Brasil muestra que la asociatividad formalizada
permite mejorar la inserción en mercados, acceder a financiamiento y generar
economías de escala (Serrano et al., 2021; Santamaría & Cárdenas, 2023;
Vélez et al., 2019). Sin embargo, los procesos de formalización requieren
políticas integrales que combinen acompañamiento técnico, simplificación de
trámites y promoción de cadenas de valor.
Beneficios Potenciales para Pequeños
y Medianos Productores
La nueva normativa puede contribuir a la
reducción de la informalidad, brindar mayor seguridad jurídica, y abrir puertas
a mercados más exigentes. A nivel económico, los productores organizados
podrían mejorar su poder de negociación, reducir costos y acceder a programas
estatales y privados. A nivel social, la formalización fortalece la cohesión
comunitaria y la representación frente al Estado.
La evidencia internacional muestra que la
formalización puede generar beneficios sostenibles si se acompaña de asistencia
técnica y acceso a mercados. En Colombia, la asociatividad enfrenta retos de
baja capacitación y falta de infraestructura (Serrano Amado et al., 2021). En
Ecuador, la asociatividad se vincula con procesos de descentralización y
autonomías territoriales (Burneo, 2019). En Perú, programas como AGROIDEAS han
tenido impactos limitados en ingresos, pero positivos en adopción tecnológica y
capacidades organizativas (Ministerio de Economía y Finanzas & Fondo
Internacional de Desarrollo Agrícola, 2024). Por su parte, Haku Wiñay ha
fortalecido ingresos familiares y resiliencia mediante grupos asociativos
locales (FONCODES, 2023). La FAO (2024) subraya que la asociatividad es clave
para la resiliencia alimentaria, especialmente en contextos de crisis.
Limitaciones y Retos Pendientes
A pesar de los avances, subsisten retos como la
falta de infraestructura productiva, el acceso desigual a la información, y la
necesidad de superar la desconfianza histórica hacia las organizaciones
colectivas. La implementación efectiva de la Ley N.º 32434 dependerá en gran
medida de la coordinación interinstitucional, el financiamiento sostenido y la
capacidad de generar confianza entre los productores.
Los principales beneficios de la Ley N.º 32434
incluyen el acceso ampliado a crédito, reducción de cargas fiscales y mejor
inserción en mercados diferenciados. Sin embargo, persisten riesgos como el
denominado 'enanismo tributario', donde las organizaciones podrían limitar su
crecimiento para no perder beneficios, y la coexistencia normativa entre formas
asociativas y cooperativas que puede generar duplicidades regulatorias.
Conclusiones
La Ley N.º 32434 representa un avance en el
reconocimiento de la asociatividad agraria, pero requiere de políticas
complementarias que aseguren su efectividad en el territorio. Su potencial para
beneficiar a pequeños y medianos productores es significativo, siempre que se
aborde de manera integral y con participación de los propios agricultores. En
definitiva, la formalización de la asociatividad constituye una herramienta
estratégica para la transformación del sector agrario peruano en un escenario
de creciente competencia global.
La Ley N.º 32434 constituye un refuerzo
legislativo a la formalización de la asociatividad agraria en el Perú. Su
efectividad dependerá de la implementación efectiva y del acompañamiento
institucional. La experiencia comparada en América Latina evidencia que los
incentivos legales deben complementarse con políticas de inclusión productiva,
compras públicas y apoyo técnico sostenido. En este marco, la formalización se
configura como una herramienta estratégica para el fortalecimiento de la
pequeña y mediana agricultura.
Referencias
Burneo, J. (2019). Notas de federalismo para la
reforma del Estado ecuatoriano. Revista Jurídica Federalismo, 6(13), 25–34.
Congreso de la República del Perú. (2025). Ley
N.º 32434: Ley que promueve la transformación productiva, competitiva y
sostenible del sector agrario con protección social hacia la agricultura
moderna. Diario Oficial El Peruano.
FAO. (2024). Resultados del proyecto 'Alianzas,
procesos asociativos y vinculación comercial de la agricultura familiar en
tiempos de la COVID-19 en América del Sur' (TCP/RLA/3806). Santiago: FAO.
https://doi.org/10.4060/cd1202es
FONCODES. (2023). Emprendedores del cambio: V
concurso nacional de experiencias exitosas de emprendimientos del proyecto
productivo Haku Wiñay/Noa Jayatai. Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social.
Ministerio de Economía y Finanzas, & Fondo
Internacional de Desarrollo Agrícola. (2024). Evaluación de impacto del
Programa de Compensaciones para la Competitividad – AGROIDEAS. MEF/FIDA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes dejar tu comentario a continuación